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Noctámbulo: un demo argentino pixelado con alma andina y corazón roto |
En lo alto de la Cordillera de los Andes, bajo una noche cargada de música y misterio, un conejo despechado se lanza a una aventura improbable: colarse en el boliche más exclusivo del pueblo para recuperar a su amor perdido. Así arranca Noctámbulo, una aventura gráfica con estética de Game Boy Color desarrollada por el dev Otacorp y que ya podés probar en Steam.
Beni, el conejo borracho que busca redención
La historia sigue a Beni, un joven conejo que, tras una pelea con su pareja Boni, decide infiltrarse en el club nocturno Noctámbulo durante el concierto de la banda de rock Lopez Schneider. Pero el camino está lleno de obstáculos: gatos sospechosos bloquean la entrada, los aliados brillan por su ausencia, y ni siquiera tiene una entrada.
Plataformero sin saltos imposibles
Aunque el juego se presenta como un plataformero, su corazón está en la exploración y los puzles. No hay barra de vida ni game over: lo que importa es observar, recolectar objetos y reconstruir la historia de Beni a través de pistas y detalles. Es un Jump and Kick con alma de Point and Click.
Fiesta, mapa y estados de ánimo
El boliche Noctámbulo es un laberinto social. Para avanzar, vas a tener que ayudar a otros personajes, seguir pistas en tu cuaderno de misiones y prestar atención al estado de ánimo de Beni, que puede afectar cómo se desarrollan las interacciones. El timing emocional también es parte del desafío.
Un pixel art con identidad
Noctámbulo es el debut del artista Ota Jaider y la compositora Chozz.Art. Su estética mezcla la cultura andina tradicional con el diseño gráfico urbano de los años 60 y 70, creando un universo visual único. La banda sonora original fusiona folclore andino, jazz y electro pop, sumando capas de atmósfera a cada rincón del juego.
Noctámbulo ya tiene su demo disponible en Steam (haz click aquí para ir a la página del juego). Si te gustan las aventuras con sabor local, personajes entrañables y una estética que no se parece a nada, Noctambulo es una parada obligada.
