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ANÁLISIS: Front Mission Remake |
¡Saludos a todos los lectores!
Quiero arrancar diciendo que esta es la primera vez que puedo experimentar o jugar este clásico título de Super Nintendo. Luego fue porteado a otras consolas, pero solo una logró salir de Japón. Por suerte como dice el dicho, “más vale tarde que nunca” gracias a Forever Entertainment podemos disfrutar de este gran juego de los 90.
Quiero hacer una pequeña introducción de los chicos de Forever, ya que en estas últimas temporadas se volvieron bastante famosos por los grandes clásicos que están remasterizando, se podría decir que están siguiendo la estela de Deep Dive a la hora de rescatar viejas joyas. Ya en su haber tienen juegos como Panzer Dragon, The House of the Dead y próximamente Front Mission 2. Me gustaría que progrese esta relación con Square para que traigan algún día el Parasite Eve. Sería grandioso.
Volviendo al inicio de una de las franquicias más importantes de la época de Squaresoft. Front Mission nos sitúa en un futuro no muy lejano en una isla ficticia llamada Huffman. Nuestro protagonista se encuentra en una misión de reconocimiento con su novia y es atacada por fuerzas contrarias, dando con el supuesto fallecimiento de su amada, nuestro protagonista se vuelve piloto mercenario. Para los más nuevos en la saga, los mechas en el juego son nombrados como Wanzers, las herramientas de la guerra moderna en la línea del tiempo del juego. Hasta el momento tenemos un repaso rápido de la historia donde darán un par de giros interesantes, si te atrapan las tramas con guerras, conspiraciones y política. Front Mission las sabe llevar muy bien.
Como mencioné al principio, nunca pude jugar la versión original del SNES, por lo tanto, este análisis es desde la perspectiva de alguien que lo está jugando por primera vez. Debo decir que en un principio se hace cuesta arriba hasta entender las mecánicas, no son complejas, pero si te obligan a pensar por un momento cada movimiento que hasta lograr un nivel de experiencia óptima en las partidas. Su estilo de juego es un clásico de estrategia por turnos al mejor estilo ajedrez, tenemos nuestras unidades, las movemos en nuestro turno, se termina y continua el enemigo de forma sucesiva hasta dar con la victoria. Las primeras horas son bastante duras porque hay que tener cierto cuidado con las acciones que tomemos, al ser nuestras unidades amateurs no tienen la experiencia correcta y van estar constantemente fallando los objetivos y llegado a este punto la IA todo lo contrario, no perdona hasta liquidarte los Wanzers aliados.
Conforme nuestros pilotos destruyen piezas o wanzers enteros, los mismos irán adquiriendo experiencia en una rama determinada en el personaje. A saber; tenemos cuatro especialidades por unidad: Físico (mano a mano), Corto (Armas), Largo (Misiles) y Esquivar, que lógicamente sirve para evadir ataques de los enemigos. Estas 4 estadísticas se pueden subir a 9999 puntos de experiencia sin ninguna limitación o barrera, lamentablemente esto no se explica en ningún momento del juego y solo nos queda adivinarlo mientras jugamos. Lo mismo pasa con las habilidades especiales, a determinado momento se desbloquea esa habilidad que nos ayudará muchísimo en la batalla, pero nada de eso se logra explicar. Es por esto que si sos nuevo en este género puede resultar chocante que no se te explique la situación. Otro punto a remarcar que, para conseguir estas ventajas, deberemos derrotar muchísimos Wanzers, que la campaña por sí sola no los puede entregar, la decisión que se tomó en aquella época (salvo gráficos, sonidos y adaptación del control todo sigue igual), fue implementar una sección llamada coliseo. En cada ciudad que recorreremos de Huffman tendremos dicho sector para batirnos a duelo con los contrincantes de cada ciudad, estos mismos se pueden repetir de manera indefinida además de apostar dinero. Si encontramos el truco, no solo llevaremos al límite la experiencia de nuestros personajes que sino también nos llenaremos de dinero. Esto nos va a generar muchísimos combates que pueden tornarse repetitivos pero una vez conseguido lo que necesitamos, las peleas de la campaña van a poder ser completadas sin problema alguno.
Habiendo descrito un poco su jugabilidad y mecánica, paso a mencionarles que su apartado sonoro se podría decir que cumple sin más. Se rehicieron músicas como sonidos, los cuales no son muchas. Tiene diferentes melodías en los combates, se repiten las mismas en las ciudades, bar, centro de mando y coliseo.
A nivel gráfico estamos un escalón por encima, lógicamente, de su versión original. Se limitaron a realizar en 3D lo que antes se veía en 2D. Se respetaron escenarios como los modelos de los Wanzers. La ventaja si se quiere de esta conversión esencial es que a nivel técnico no es muy demandante, en mi caso que lo jugué en pc, con un equipo humilde se va a poder jugar sin problema alguno.
En términos generales es un juego que cumple, si bien esta modernizado para los tiempos actuales. Se nota que se hizo el remake uno a uno dado que se siente, por momentos, muy antiguo. Especialmente con detalles como las faltas de tutoriales, cinemáticas, hud poco interactivo para entender las situaciones de combate, etc. Mi estadía en el juego duro más de 30 horas, algo bastante extenso que si logras engancharte se torna un juego bastante entretenido. Sumado una segunda campaña que no estuvo en el original algo peculiar e interesante que para los que jugaron el original pueden redescubrirlo en este remake. Para el resto, es una buena oportunidad para introducirse en el universo de Front Mission tradicional.
