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ANÁLISIS: Prince of Persia The Lost Crown |
La mítica saga creada por Jordan Mechner vuelve de la mano de los creadores de Rayman Legends con un excelente metroidvania.
Que se puede decir del primer Prince of Persia que no se sepa a esta altura. Aquel juego es uno de los más influyentes de la historia de los videojuegos y uno de los mejores títulos de la historia. Pero desde ese primer juego de 1989 muchos otros de la saga han pasado, algunos realmente muy buenos como otros un poco más flojos, pero no hay que negar que la marca siempre se mantuvo vigente y es por sí misma toda una franquicia, incluso tuvimos una digna película de Disney hace ya unos años.
Pero, aunque parezca increíble, hace 14 años que no teníamos una nueva entrega del príncipe, y tengo que reconocer que tenía muchas dudas del enfoque que se le estaba dando a este reinicio. En este análisis les voy a contar que me pareció este nuevo Prince of Persia y si esta a la altura de su enorme legado.
Al rescate del príncipe
Prince of Persia The Lost Crown vuelve a la jugabilidad clásica plataformera en 2D de los primeros juegos pero con un nuevo enfoque metroidvania, que nunca se había visto en la franquicia.
En este caso el juego no nos pone en el papel del príncipe, sino de Sargon, el miembro más joven de un grupo de poderosos guerreros de Persia, llamados los Inmortales. Acá nuestros héroes van a embarcar un viaje hacia el monte Qaf para rescatar al príncipe Ghassan, un lugar donde el tiempo esta roto y han quedado atrapados.
Como se imaginarán la trama no es nada del otro mundo, pero tengo que reconocer que es suficientemente buena como para mantenernos interesados durante la aventura. Lo bueno es que esta contada de una forma ligera que no molesta en ningún momento y guarda algún que otro giro que nos puede llegar a sorprender.
Un metroidvania al nivel de los mejores
Nos encontramos con un metroidvania de manual con un mapa enorme lleno de laberintos muy intricados y cosas para hacer. Una de las mejores cosas que hace el Prince of Persia The Lost Crown es como se nos va revelando el enorme escenario que es el monte Qaf. El diseño de los niveles es espectacular, con una mezcla perfecta entre exploración, plataformas, puzles y combates.
Contamos con numerosos caminos para explorar e investigar que suelen llevarnos por diferentes retos y recompensas por los que merecen la pena pasar. El juego siempre nos esta animando a explorar, haciendo que el ir moviéndonos de un lado al otro por el mapa sea una experiencia muy gratificante. Cada zona que recorremos es diferente y tiene su propia personalidad, haciendo que nuestra aventura sea muy variada y que siempre nos encontremos con algo nuevo para sorprendernos.
He pasado por momentos en los que tenia muchos caminos abiertos que no sabía por dónde continuar, es inevitable no sentirse perdido en varios momentos de la aventura, pero nunca lo vi como algo malo, sino como parte de la experiencia, me hizo recordar a los juegos de plataforma que jugaba en los 90 donde no teníamos ningún tipo de guía y dependía exclusivamente de nosotros el poder avanzar en el juego.
Pero no se asusten, la gente de Ubisoft Montpellier tuvo la excelente idea de poner un modo guiado para aquellos que no están acostumbrados a este estilo de juego o para quienes no se quieran complicar durante la aventura. Hasta existe la posibilidad de tomar fotos de los puntos del mapa que nos interesan para poder volver en otro momento, toda una genialidad que no había visto nunca en un juego de este estilo y que es realmente muy útil.
Por último, voy a hablar del enfrentamiento con los jefes finales, estos son realmente memorables, todos tienen patrones de ataque y defensa que debemos aprendernos bien para poder superarlos. Son todo un espectáculo de diseño y personalidad, y estoy seguro que son de lo mejor que se vio en el género.
Una jugabilidad a la altura
Todo este excelente diseño de niveles, no sería nada, si no estuviera acompañado de una jugabilidad a la altura, y tengo que decir que es muy satisfactoria, Sargon se mueve de forma ágil, veloz y su respuesta a los mandos es perfecta.
El sistema de combate es muy elaborado y más profundo de lo que uno podría pensar en un principio. Y esto es realmente importante ya que los combates son realmente desafiantes y vamos a morir en muchísimas oportunidades, en especial cuando nos enfrentemos a los diferentes jefes con los que nos vamos a cruzar.
Sera fundamental dominar bien el esquive y los bloqueos para después contragolpear para avanzar en la aventura, al comienzo el sistema de combate es bastante simple, pero poco a poco iremos descubriendo nuevos movimientos que vamos a poder encadenar de formas realmente espectacular.
El otro aspecto para destacar es el plataformero. Acá se nota el buen hacer de los creadores de Rayman, hay partes que pareciera ser todo parte de un gran rompecabezas, donde debemos averiguar que hacer para poder avanzar esa sección. Estas secciones son exigentes, especialmente aquellas que nos llevan a lugares opcionales, pero gracias a la excelente respuesta de nuestro protagonista, no nos cansaremos tratando de superarlas.
En resumen, tanto el combate como el plataformero son satisfactorios a los mandos. Es de esos juegos donde uno puede pasarse hora yendo de un lado a otro sin cansarse. Por momentos se vuelve realmente adictivo, en especial cuando logramos desbloquear habilidades que nos permiten llegar a lugares que antes eran inaccesibles. También se suman unos puzles realmente ingeniosos donde debemos aprovechar todas nuestras habilidades, ya que nos invitan a ser conscientes de las habilidades que tenemos a disposición para poder superarlos.
Un acertado estilo gráfico
He leído en algunos análisis y opiniones que este es el apartado más flojo del juego, y tengo que disentir con todos ellos. Creo que el apartado gráfico es perfecto para el juego que se nos quiso presentar. Tienen un estilo entre cartoon y animación japonesa que le queda calzado a la franquicia, las animaciones de Sargon son increíbles y todo se mueve con una fluidez envidiable. También, el diseño de los niveles es increíble y los jefes finales, algunos de un tamaño considerable, son todo un alarde de imaginación.
Lo probamos en una Xbox Series X y el juego se mantuvo siempre estable a 60 fps, y no tuve ningún bug durante las horas que lo estuve jugando.
En el aspecto sonoro, poco para reprochar, los temas que suenan de fondos son correctos, destacando los que suenan en los enfrentamientos con los jefes. Las voces están en español pero no en latino, pero me gusto que se pueden poner en idioma persa. Siendo para mi la mejor manera de disfrutar la aventura.
Conclusiones
Si llegaron hasta acá ya sabrán que son muchas las cosas que me gustaron de Prince of Persia The Lost Crown. Para mi una de las grandes sorpresas de este reciente comienzo de año, un metroidvania que hace todo bien, es desafiante, duradero, divertido y con un diseño de niveles sobresaliente. La jugabilidad es perfecta, con un plataformero y un combate que son desafiantes y profundos, con unos puzles y jefes de una imaginación que solo los creadores de Rayman Legends podían crear.
Prince of Persia The Lost Crown es uno de los mejores juegos de la franquicia y me atrevo a decir que uno de los mejores metroidvania de todos los tiempos, y aunque recién comienza este año, un firme candidato a juego del año.
Si con juegos como estos comenzamos el 2024, después de un excelente 2023, no me quiero imaginar cómo vamos a terminarlo.
