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| Análisis: Re:Call, una apasionante y emotiva historia que viaja en el tiempo. |
Lo nuevo de Matías Schmied o “maitan69″, nos trae una aventura en pixel art digna de ser elogiada. Un guion exquisito, una historia emotiva que toca fibras sensibles y, por sobre todo, muchos giros argumentales que me mantuvieron prendido al juego y a su historia las 8 hs aproximadamente que me llevó terminarlo.
Re:Call me pareció un juego muy fresco, una novela en la que nos sumergimos desde el primer minuto. Rápidamente, tomamos el control de un personaje y entendemos la dinámica que nos proponen: Las decisiones que tomemos en una línea temporal, tendrán un efecto inmediato en el presente. De esta manera, el juego nos propone un desafío nada más comenzar, escapar de una fábrica, tomando las decisiones correctas y alterando el pasado para lograr modificar los eventos del presente.
Nuestro protagonista será Bruno Cerati, y junto a su amigo Harry García, tendrán que resolver los misterios que se esconden detrás de estos “extraños poderes” con los que contamos, además de conocer a una variedad de personajes muy interesantes con los que nos iremos cruzando en nuestro camino. Muchas veces tendremos que escapar de alguna situación peligrosa, otras resolver un crimen, o simplemente indagar en los recuerdos de algún personaje para obtener información clave en la historia.
No solo desentrañar la misteriosa historia de nuestro protagonista será la misión principal, también iremos conociendo su difícil pasado, sus miedos, sus preocupaciones, y todo se nos cuenta de una hermosa manera, que te llega al corazón. Re: Call nos propone tomar conciencia sobre temas muy delicados como la discriminación, el bulling y también reforzar la importancia del amor, la familia y los amigos. Una historia bellísima que recomiendo jugar y experimentar a cualquiera que disfrute no solo de los videojuegos, sino también de una apasionante novela.
El juego presenta una banda sonora que acompaña perfectamente nuestra historia, un gameplay simple y sencillo, y se enfoca fuertemente en lo que está contando y “como la cuenta”. Nuestras decisiones y los diferentes viajes en las líneas temporales, harán que no podamos despegarnos de la pantalla para seguir jugando y querer saber como termina esta gran aventura.
Un detalle que me encantó, es que utilizan un lenguaje bien “argento”. Los diálogos no son en neutro, sino que los personajes utilizan el lunfardo también. Tendremos diálogos donde nos tratan de “pibe”, “capo”, “boludo”, o el tan identificado “che” que nos representa en muchas partes del mundo. Es un distintivo que le viene de lujo al juego y a la historia.
Otro detalle genial que sumaron los desarrolladores, es que los personajes de la historia llevarán como apellido el nombre de diferentes bandas o artistas de nuestro querido rock nacional. Es así como nuestro protagonista, Bruno “Cerati”, conocerá a entrañables personajes como “Dominik Attaque”, “León Spinetta”, “Violet Divididos” o “Lucas Paez”. Un hermoso guiño a nuestra música.
Re:Call es una hermosa obra, cuenta una historia atrapante y misteriosa, que nos pone a nosotros como jugadores, en el eje principal de la misma, nos hace parte de todo este misterio. Tomar decisiones no será fácil, el efecto mariposa se hace presente, y toda acción que llevemos a cabo en el pasado, afectará nuestro presente, y puede poner en riesgo la vida de más de uno. Un guardia podría estar parado junto a una puerta con una herida menor en la cabeza, pero ¿y si el protagonista recordará haber tomado un arma en lugar de una piedra?. Las posibilidades son muchas y los resultados cambian según nuestro accionar en las diferentes líneas de tiempo y según modifiquemos los recuerdos de la mente de quienes nos rodean. Interesantísima historia para jugar y disfrutar.
Recomiendo que prueben Re:Call, no solo porque es una forma de apoyar el desarrollo nacional de videojuegos, sino porque sinceramente es una experiencia que al vivirla dan muchas ganas de compartirla con todo aquel que disfrute de los videojuegos y de una historia maravillosa y para el recuerdo.
