Sonic Frontiers: La prueba de la Gamescom 2022.

Sorprendidos quedamos al ver en la Gamescom que el juego que tanto nos descolocó en los últimos meses hoy se encuentra en buena forma. Sonic Frontiers no venía gozando de buena fama, con gameplay poco inspirado y problemas de optimización evidentes, de pop-in y un level desing pobre entre varios incovenientes. Pero las cosas mejoraron notablemente con la versión que vimos en la Gamescom, ya que contaba con una mejor resolución, mejor level desing y evidentemente menos pop-in, lo que nos invita a preguntarnos, ¿Pueden los fans de Sonic comenzar a festejar? Es lo que vamos a analizar en este artículo.  

Sonic pego el salto de calidad en la Gamescom, ¿Lograra estar en perfecto estado para su fecha de salida?


Sin Fronteras

Tener un juego de mundo abierto de nuestro peludo azul nunca fue una mala idea, ya que no se nos ocurre nada mejor para valorizar las características de un personaje que hace de la velocidad su punto fuerte. Aun así, es todo un desafío trasladar este personaje a un “gameplay nuevo” puesto que su rapidez representa un desafío a la hora de crear un mapa y escoger lugares que valoren las características que siempre esta saga tuvo, sin olvidar algo sencillo, pero que siempre destaco a la franquicia y es que siempre había una meta, mientras que aquí las reglas cambian. 


Para lograr encontrar el equilibrio entre lo que Sonic siempre tuvo y lo nuevo que desea mostrar, sigue el mismo camino que otros juegos antes que él: Renunciar a características icónicas para transformarlas en pequeños momentos que premien al jugador por ser un atento explorador del mundo ofrecido por Sonic Frontiers. ¿De qué manera? Los recorridos a tiempo que siempre estuvieron ahora son “corridas” a través de plataformas que le dan velocidad y espectacularidad al personaje y las peleas con enemigos ahora están divididas entre batallas con personajes de bajo nivel y pequeños mini boss que podremos encontrar en nuestro viaje. Ligeros cambios que no traicionan los orígenes de la saga, pero que dan respiro para implementar nuevas ideas de gameplay.


¿Les recuerda algo en particular?


Sonic Frontiers está dividido en Islas, y cada una de ellas cuenta con un bioma que la caracteriza. En su primera aparición en California, Sonic nos mostró un mapa similar al que vemos en el tráiler, con vastas zonas verdes, árboles y entornos con colinas. En el caso de la Gamescom, el mapa que se pudo probar es un mix entre desierto y oasis, con la arena que sobresale a primera vista y que concede mucha libertad de movimiento. El objetivo en ambas pruebas siempre fue el mismo: Juntar las gemas que desde el altar se nos vienen requeridas. En estos momentos vimos, por un lado, las mejoras del juego, ya que mucho se trabajó para obtener una versión mucho más estable con resultados a la vista, por el hecho de que en la primera prueba el alcance de visión en superficies altas era limitado y muy cercano al jugador, mientras que ahora es posible contemplar el panorama a gran escala de manera correcta. A pesar de todo lo bueno, aún hay problemas de pop-in evidentes en distintas superficies que aparecen y desaparecen, sobre todo en esas plataformas que le permiten alcanzar a Sonic otras áreas del mapa. 


¿Es grave? Mucho menos que en las versiones vistas en los últimos meses, pero sigue siendo un problema, ya que condiciona la posibilidad que sea el jugador quien decida hacia donde ir. El mapa en este sentido es una ayuda bastante importante, porque suele ser preciso con sus indicaciones y de esa manera evita que sea tan frustrante el fenómeno de pop-in presente. Esperamos que optimicen el juego antes de su lanzamiento. 
Lo que el mapa no nos indica, son los pequeños y tiernos Koco que deberemos encontrar y llevar a Hermit Koco y Elder Koco a cambio de recompensas. Los Koco son tiernos seres de piedra que según el producer de Sega Japan esconden una serie de secretos que deberemos descubrir en la historia principal. 




Los enemigos son una de las cosas que más han sorprendido a los fanáticos de Sonic, sin dudas, ya que no hay rastro del Dr. Eggman y de los habituales. Takashi Lizuka define a los enemigos enigmáticos, alíenos, pensados específicamente para que, junto con el entorno y el mapa que nos acompañan, dejen esa sensación alienígena que los creadores desean transmitir. El resultado en esta prueba ha sido positivo, con ambientes enigmáticos que despiertan la curiosidad del jugador, enemigos lo suficientemente diferentes, algunos normales, otros mini boss interesantes y hasta un tiburón que sorprendió en el entorno arenoso del mapa de la Gamescom. Si a eso le sumamos un entorno pensado para atrapar la atención y mecánicas que respetan la saga original y la valorizan con interesantes “mini juegos” podemos mirar a Sonic Frontiers con buenas esperanzas. Al mismo tiempo, no podemos negar que aún hay varios problemas por resolver, ya que limitan la experiencia de juego de manera evidente, con sobre todo un pop-in muy fastidioso y una duda relativamente importante, ¿Cuán divertida puede ser efectivamente esta fórmula open world para un juego Sonic?  Esta y otras dudas las contestaremos el 8 de noviembre 2022 que desde Extragamers podamos analizar a fondo a Sonic Frontiers.