Análisis: DORFS Hammers for Hire .

Análisis DORFS: Hammers for Hire .
Análisis DORFS: Hammers for Hire .



Cuando pensamos en videojuegos que sean cooperativos, pensamos en amigos, pareja, risas, diversión y sobre todo momentos para pasarla bien. Eso es lo que nos propone DORFS: Hammers for Hire, un juego de industria nacional, que es efectivo y logra su cometido: hacerte pasar un buen rato, disfrutar y divertirte. En estas breves líneas les cuento mi experiencia con él.




DORFS es un juego que nos pone en la piel de un grupo de enanos herreros y muy trabajadores, los cuales tienen como objetivo principal crear y construir, en el menor tiempo posible, las diferentes armas, armaduras y herramientas que un ejército puede necesitar en una batalla. Nos cuentan la historia de una enorme fortaleza en lo alto de una montaña, la cual fue tomada a la fuerza por el enemigo, una especie de “masa” oscura y viscosa que ahora tiene el control. Nuestro grupo de enanos herreros, en columnados detrás de un valiente soldado que buscará reclamar la fortaleza, comenzarán el ascenso por la montaña y nos llevarán por los más variados y pintorescos escenarios.




El juego nos permite seleccionar entre 5 personajes distintos, ninguno con habilidades particulares o específicas, ya que todos trabajan de la misma forma, y el objetivo será craftear la mayor cantidad de herramientas posibles, para la batalla. En este sentido, el juego plantea algo muy similar a lo ya conocido en juegos como “Overcooked” por ejemplo, donde se nos propone ir entregando una serie de pedidos en un determinado tiempo y de esa manera iremos ganando “banderas”. Al obtener 3 banderas, la partida estará terminada o bien si el tiempo se acaba, debemos tener al menos 1 bandera en nuestro poder para continuar al siguiente nivel.




El mapa es variado y se divide en 5 grandes biomas: bosques, pantanos, volcanes, una montaña helada con mucha nieve y la gran fortaleza al final de nuestro camino. Cada región posee 5 niveles y un 6º nivel se desbloquea si completamos cada uno de ellos con el máximo de banderas posibles a capturar en una partida (3). Las mecánicas son sencillas y muy amigables. Debemos ser rápidos y ordenados, tomar los materiales que necesitemos (ubicados en distintos puntos del escenario), trabajarlos, combinarlos en la “mesa de trabajo” y de esa manera por fin crear los armamentos solicitados. Por ejemplo: Para fabricar un arco y flecha iremos rápidamente a tomar la madera, llevarla al serrucho, cortarla y dejarla en nuestra mesa de trabajo. Luego, debemos ir en busca del cuero, tomar lo necesario y llevarlo también a la mesa de trabajo. Allí es donde se combinan todos los materiales y recursos para formar el pedido que, posteriormente, trasladaremos a la mesa de entrega para que nos sea contabilizado y de esa manera estar un poco más cerca de ganar nuestra bandera.




En la parte superior de la pantalla, nos muestran cuáles son los pedidos y los recursos que debemos combinar para formarlos. Al principio parece sencillo, pero con el correr de los escenarios el nivel de dificultad va en aumento. Los diferentes niveles nos pondrán a prueba cada vez más, debido a que se nos presentan algunas dificultades, como pueden ser el fango en los pantanos, que nos ralentizará el paso, o el fuego en los volcanes, que en caso de quemarnos nos harán desaparecer por unos segundos.




El tiempo es un factor clave en DORFS. Nuestros pedidos deben ser entregados en un tiempo determinado, y de no lograrlo el enemigo comenzará a conseguir los estandartes. A medida que vayamos perdiendo terreno, los cajones de recursos o bien los puestos de cortes y fundición irán cambiando de lugar, por lo cual si ya estábamos acostumbrados a tenerlos en una determinada ubicación, ahora debemos reformular nuestra estrategia para no caer en la derrota. El progreso del nivel se muestra con una barra en la parte inferior de la pantalla que tiene ubicadas 3 banderas. A medida que entregamos pedidos, avanza el color azul (nosotros) y retrocede el color rojo (el enemigo).




En cuanto al apartado artístico, es una belleza. Sus dibujos y animaciones son las cosas más lindas que tiene el juego y lo acompaña muy bien una banda sonora acorde a la historia de guerreros y enanos que se nos cuenta. Si algún aspecto negativo debo marcar, sinceramente me hubiera gustado que sea un poco más largo, más niveles o escenarios por recorrer, pero es una apreciación muy personal y creo que cuando uno disfruta mucho lo que está jugando, le apena terminarlo tan rápido. También podría incluirse la selección de dificultad, en algunos casos se vuelve muy sencillo avanzar y no presenta un desafío importante, aunque entiendo también que esto permite que el juego sea apto para todo el mundo y cualquiera pueda disfrutarlo al 100% sin llegar a frustrarse en el intento. Eso también se valora mucho. El título permite jugar una campaña principal, un modo arcade y también un modo versus, tanto en cooperativo local como online y la posibilidad de jugar hasta 4 jugadores en simultáneo. Una maravilla.


DORFS es un juego simple y efectivo, que nos invita a disfrutar de grandes momentos de diversión y entretenimiento. Lo recomiendo jugar con amigos o pareja, en cooperativo, pero sepan que también pueden hacerlo en solitario y se disfruta mucho igualmente. Yo lo jugué con Gina, mi pareja, y puedo asegurar que DORFS no es motivo de divorcio (jajaja). Hay que trabajar en equipo, ser ordenados y prolijos y sobre todo tener ganas de pasarla bien. Nos llevó aproximadamente 2 horas completar su campaña principal y lo disfrutamos en PC (Por el momento es la única plataforma en donde se encuentra disponible el juego, que al momento de escribir esta nota lleva solo 1 día desde su lanzamiento) Creo que DORFS: Hammers for Hire es un trabajo muy bien hecho, bien logrado y es otro juego de industria nacional que deja bien en alto nuestra bandera.